* Continuamos nuestro análisis del acto de fe, profundizando hoy en la dimensión de la libertad que le caracteriza. Nuestra voluntad no sólo tiene la capacidad de aplicar la inteligencia a la consideración de las proposiciones de fe para obtener
* Ya hemos visto que la fe consiste en un asentimiento de nuestra facultad intelectual a una verdad (divina, en el caso de la virtud teologal), propuesta como tal. El contenido de esta verdad revelada, nos ha venido ofrecido y
* Como hemos visto, es la sabiduría, la santidad, la ciencia y la bondad de la Verdad primera, Dios, el definitivo argumento o motivo por el que un hombre puede, libre y confiadamente, dar su asentimiento creyente a Dios. En
* Con esta expresión, tomada esta vez del jesuita Rousselot, comenta Sesboué otro rasgo de la fe religiosa: en cuanto actitud interior, que pone en movimiento toda la realidad de la persona creyente, no basta con el compromiso de su
*El filósofo cristiano Jaques Maritain nos ofrece, en su libro titulado Aproximaciones a Dios, lo que él denomina una “sexta vía” (por relación a las cinco vías tomistas). A su vez, dos son las aproximaciones que a este argumento realiza