* Continuando con la reflexión anterior, sobre la importancia que tiene una iluminación cristiana respecto de este complejo mundo de la técnica que nos embarga, podemos añadir algún detalle más. * La mentalidad moderna poco o nada tiene ya que
* Con Bernard Sesboüe (en su libro Croire) también yo creo que el deseo de infinito, que atraviesa la vida del hombre, no puede brotar de un ingenuo sentimiento de ilusión pero sin fundamento, ni apoyarse caprichosamente en… nada. Nuestra
* Hemos afirmado, de una y otra forma, que el hombre conoce a Dios, que es propio de la condición humana la apertura radical y ontológica al misterio de la trascendencia: a ella se inclina por naturaleza, y en ella
*Todo hombre desea, por naturaleza, ser feliz. No conozco a nadie que en las intenciones por las que obra o deja de hacerlo, se encuentre la pretensión del dolor, como tal, de la infelicidad o la amargura, porque sí. No.
* Las pruebas de la existencia de Dios nos conducen a un Ser eterno, causa primera de todas las cosas. Se trata de una remontada desde las cosas (efectos) a su creador (causa). Es natural que cuando la inteligencia conoce
*Visto que Dios es uno –en su doble significado de simple y de único- vamos a examinar lo que queremos decir cuando afirmamos que Dios es también bueno. Recordamos que nos movemos en el nivel del conocimiento humano, de la
*Hablábamos la última vez de dos argumentos que, aunque tal vez no tienen el peso filosófico de los otros anteriormente explicados, no carecen por ello de cierto valor, sobre todo en cuanto signo o interrogante para la conciencia del hombre