* Si se afirma, como dice Delanglade (Le problème de Dieu), que la razón puede llegar a afirmar la existencia de Dios, no se entiende entonces esa especie de forzada humildad, tan frecuente bajo pretexto de modestia, sino como una
* Aunque el “piadoso” Kant no fuera ateo, sí negó la posibilidad de la razón para llegar a la afirmación de Dios, juntando de alguna manera un ateísmo racional con un teísmo voluntarístico. De él viene la idea de la